El Perro y el Gato son los embajadores del Reino Animal ante la Humanidad. Fueron ellos los últimos con quienes "nos rebajamos" para convivir con ellos. Nos dimos cuenta de sus sentimientos, nos comenzaron a alegrar e inspirar. Sentimos pena por sus vulnerabilidades. Entonces la comparación con otros animales, el cuestionamiento al desprecio ancestral que nos fue enseñado hacia ellos, comprensible, pero irracional y primitivo.
Entonces la compasión por el ser más inofensivo termina sometiendo nuestra inhumanidad, la nueva brutal honestidad no puede más que hacernos mejores, hacernos realmente distintos de ellos, hacernos ahora sí humanos. Terminan siendo entonces todas las otras especies Los Embajadores de la Humanidad.
Lennarth Anaya
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